La alimentación es un proceso voluntario, a través del cual el ser humano selecciona e ingiere alimentos; mientras que la nutrición es una actividad involuntaria, por la que el organismo asimila los nutrientes aportados por los alimentos. Para ello, los tiene que digerir, absorber y metabolizar, además de expulsar las sustancias de desecho generadas en el proceso.
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| Nutrición saludable |
Como habrás notado, la primera diferencia entre ellas, es el hecho de que la alimentación la realizamos de manera consciente, mientras que nos nutrimos inconscientemente. Por otro lado, la alimentación varía en función de las diferentes culturas, sociedades y momentos históricos mientras que la nutrición permanece igual, excepto en el caso de la existencia de diferentes patologías.
A pesar de las diferencias, ambos procesos dependen el uno del otro. Es decir, para que nuestro organismo esté bien nutrido, es necesario llevar a cabo una alimentación completa, variada y equilibrada. Sólo de esta manera podremos conseguir que nuestro cuerpo funcione de manera óptima, ya que tendrá todas sus necesidades cubiertas, y prevenir o, al menos reducir, el riesgo de padecer algunas de las enfermedades más graves y, cuantitativamente más importantes, a día de hoy en los países de nuestro entorno (cáncer, diabetes, obesidad, trastornos del comportamiento alimentario, alergias e intolerancia...).
Por todo ello, la gran necesidad de que nosotros, los dietistas-nutricionistas, como profesionales de la salud titulados, nos vayamos incorporando al Sistema de Asistencia Sanitaria público de nuestro país.
Poco a poco, a través de este blog, podréis ir conociendo secretos acerca de este interesante mundo que, aunque juega un papel esencial en nuestra vida, muchas veces no le damos la importancia que se merece.
También me gustaría que si tenéis cualquier duda o idea me la trasmitáis para poderla solucionar o debatir.
Mañana os contaré algún detalle sobre la dieta mediterránea. ¡Os espero!
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